viernes, 13 de enero de 2012

Resumen

Antonio Damasio
Comenzamos el 20 de diciembre colgando un libro de Antonio Damasio, En busca de Spinoza, y hemos terminado el otro día, lunes 2 de enero, con un libro de Elkonon Goldberg titulado El cerebro ejecutivo, ambos publicados por editorial Crítica, aunque como esta editorial pertenece al Grupo Planeta, parece que están volviéndolos a editar en Ediciones Destino, editorial también del grupo.


Bueno, pues comencemos el listado:


Son ocho "libritos" divulgativos que nos pueden informar bastante bien de ese tercio preocupante en el que Penrose enmarcaba la cuestión: la mente humana flotando entre lo más grande y lo más pequeño que concemos.
Con los libros de Damasio, Goldberg y Tononi/Edelman, nos acercamos al mundo de la mente-cerebro y podemos hacernos una idea de lo maleable e interconectado que es este órgano de apenas kilo y medio de peso que corona nuestro cuerpo.

Michel Foucault
El cerebro no es una máquina o un gran archivador en donde todo tiene su sitio, sino más bien un ecosistema neural que va madurando tanto en el  tiempo biográfico del individuo, como en el tiempo histórico de la especie.

En el cerebro no todo tiene su sitito, sino más bien el sitio se va haciendo hueco, se construye y se reconstruye; y aunque parece haber zonas especializadas, lo importante está en las interacciones entre lóbulos, áreas, e incluso neuronas a nivel de enlaces sinápticos.

Porque tan importante es el lugar en donde se producen los acontecimientos como las vías o redes axónicas que interconexionan esos varios lugares cerebrales.

Con David Linden observamos un cerebro que no es especialmente un órgano homogéneo, sino que puede verse con facilidad que ha ido "creciendo" a golpe de imposturas, de reciclajes, usando varios tipos de células, varias formas de conexiones, incluso la química de los neurotransmisores, apostando más por la cantidad que por la calidad del acabado final.

Elkohonon Goldberg
Con Damasio, vemos cómo la parte llamada racional de la actividad cerebral no puede verse como algo independiente de la parte emocional, de manera que una y otra actividad se influyen mutuamente; pero, además, que la mente deja de ser una sustancia extraña al cuerpo, sino que precisamente la mente se origina para contar la historia de los múltiples acontecimientos del cuerpo, utilizando dicha historia  para optimizar la vida del organismo.

Otros libros, como el de José Hierro-Pescador, nos acercan a la historia del estudio de la mente y de la conciencia, viendo cómo se ha pasado de la filosofía a un verdadero estudio científico, desde Descartes, que separó la cosa pensante de la cosa extensa (mente y cuerpo por separado), hasta las modernas visiones actuales científicas. Es este un libro que no puede resumirse.

Hicimos un alto y colgamos los libros de Foucault y de Ferrater Mora porque nos acercaban al universo del yo desde el punto de vista sociológico, no tanto como un problema de integración de input/ouput de información en un cerebro, como la conducta o las tecnologías o las crisis en las que ese cerebro pensante ha ido elaborando o cayendo a lo largo del acontecer histórico, mejor dicho del historicismo europeo.

Bueno, baste este pequeño resumen, que intentaré que se convierta en recensión en PIENSO, LUEGO INSISTO,  y volvamos al trabajo. Los próximos índices que intentaré colgar en esta página van a tratar sobre lo pequeño, yendo a lo más profundo del Universo a, como diría, a lo más pequeño del origen del hombre sobre una infinitésima porción de lo más grande.

No os aburro más por hoy. Salud.

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